¿Quién llora el primer día de clase?


Hay muchos niños que empiezan su periplo académico por primera vez a la tierna edad de 3 años en los colegios "de grandes". Desde hace unos años se les recomienda a los padres ( se establece de forma obligatoria en los colegios) un periodo de adaptación para los menores. 
Durante quince días los niños acuden al centro escolar probando diferentes horarios y duración de las clases hasta su cuasi_completa adaptación al medio. Después de mi primera experiencia, hace ya dos años y preparándome para la segunda, dentro de un año; yo; a criterio personal exclusivamente, me atrevo a afirmar que la adaptación es para los padres. 

¿Los niños lloran?, pues la verdad es que algunos sí, pero sus madres más.

 Por fuera o por dentro , lo cierto es que los que lo pasamos mal de verdad (separándonos de nuestros hij@s) somos los padres . Unos lloran a moco tendido, otros disimulan con una repentina alergia al polen ( de otoño) y la mayoría sacamos fotos desde diferentes ángulos con el móvil, la tablet o la cámara de fotos para inmortalizar el punto de inflexión entre el bebé que salió de casa y el niño que entra en el colegio.
 El apego es una relación directa, sana y absolutamente normal que manifiestan los niños en forma de llanto, la mayoría, porque sienten que no van a volver a ver a su mamá que le deja con un extraño en un lugar totalmente desconocido. Yo diría que el apego es la mariposa que da vueltas en el estómago en el momento que ves a tu niñita del alma entrar en el colegio para aprender, madurar y en definitiva hacerse mayor. Nos da penita ver esas piernecitas tan chiquititas alejarse de forma torpemente graciosa y se nos hace un nudo en la garganta: -'¡Ahy!, ¡Cómo pasa el tiempo!'- Oyes a lo lejos en forma de suspiro con la sana intención de justificar el demoledor silencio que se crea cuando todos los niños están en sus aulas, mientras los padres esperamos en las rejas del colegio a que pasen los primeros 30 minutos de la vida escolar de nuestro pequeños, cuales presos amotinados.
Apego no es para los niños, apego es para los padres.
Y hablando de apego recomiendo la lectura de una post maravilloso acerca de este tema, post que está escrito por Catherine l'Ecuyer, abogada, consultora de empresas , investigadora en educación y escritora:
Apego & Asombro.
Espero que ya hayáis pasado la adaptación, ánimo madres y padres, ¡hay que hacerse fuertes!

Comentarios

  1. Uy, todavía recuerdo la primera vez que dejé a mi retoño en la guarde. Qué dolor más enorme. Yo que no me había separado ni un sólo día de él, de pronto tenía que dejarlo en manos de unas desconocidas.
    Ese fue el día que realmente se cortó el cordón umbilical ;)
    Y ahora han pasado 4 años y mi pequeño se va feliz y contento a su cole y yo, también.

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    1. A mi me pasó también dos veces con el mayor, entre la guarde a los 12 meses y el cole a los 3 años ... yo soy de las madres que 'sufren alergia' otoñal jajajajajajajajajaja. Con Helena no me ha pasado todavía, pero en septiembre del año que viene creo que será cuando me dé cuenta que 'quedaré sin bebé' en casa... sniffff

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  2. Mi princesa empezó el cole el mes pasado. Y me he sentido totalmente identificada con todo lo que cuentas. La que ha necesitado adaptación he sido yo, qué pena me entraba al verla entrar en el cole, casi me echo a llorar allí en medio de los demás padres, me costó la vida reprimir las lágrimas. Y mi niña pequeña feliz y contenta diciéndome adiós con la mano y corriendo para entrar la primera en el cole. Sólo le faltó decirme: "mamá vete ya".
    Ayyy, los hijos... Cuánta razón tienes Ana Belén.
    Besitos,
    Cristina, ♥ Copittos ♥
    A partir de ya me quedo por aquí para no perderme nada. Me encanta lo que he leído.

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    1. Te entiendo amiga, a mí me pasó lo mismo, se me subieron unas mariposillas por el estómago... las mismas que a ello les hacen volar hacia el crecimiento. Todos crecemos y que ellos lo hagan sanos es algo de agradecer. Este curso escolar los dos se gradúan, el mayo en infantil y la pequeña en la guardería, los dos cambian de ciclo... me estoy preparando. Tú ya sabes que no estás sola, que puedes contar con la ComUnidad de Cuidados para que tus penas se hagan más pequeñas. Quédate y lo verás.
      Un besote enorme.

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